Ambos candidatos presidenciales coinciden: Debemos dejar de arrestar a personas por marihuana
En un raro momento de acuerdo, los dos principales candidatos presidenciales en las próximas elecciones de EE.UU. han adoptado una postura compartida sobre un tema importante: detener los arrestos de individuos por posesión de marihuana.
A pesar de sus diferencias históricas, la vicepresidenta Kamala Harris y el candidato presidencial republicano Donald Trump están alineados en la política sobre el cannabis, lo que resuena con una creciente mayoría de estadounidenses.
Por qué ambos candidatos ahora apoyan la reforma de la marihuana
Hace apenas unos meses, la vicepresidenta Harris publicó en las redes sociales afirmando: “Nadie debería ir a la cárcel por marihuana”, un claro giro desde su anterior oposición a la legalización de la marihuana.
En contraste, Donald Trump, en una publicación más reciente, dijo: “No necesitamos arruinar vidas y malgastar los dólares de los contribuyentes arrestando a adultos con pequeñas cantidades”, señalando un cambio importante desde su anterior postura dura contra las drogas. Esta evolución en la posición de ambas figuras políticas refleja un cambio más amplio en la opinión pública.
Según las últimas encuestas de Gallup, el 70% de los adultos en EE.UU. ahora apoya la legalización de la marihuana, un aumento notable en comparación con hace apenas una década. Este creciente apoyo trasciende las líneas políticas, con el 87% de los demócratas, el 70% de los independientes e incluso el 55% de los republicanos a favor del cannabis legal.
Contexto histórico y políticas fallidas
El movimiento para criminalizar la marihuana comenzó a principios del siglo XX, impulsado en gran medida por mitos y xenofobia más que por preocupaciones legítimas de seguridad pública. A pesar de décadas de prohibición, casi la mitad de todos los arrestos relacionados con drogas hoy en día siguen siendo por posesión de marihuana.
Los críticos argumentan que esto ha sido un enorme desperdicio de recursos, con los arrestos afectando desproporcionadamente a jóvenes y personas desfavorecidas económicamente.
Además, la prohibición de la marihuana ha hecho poco para frenar su consumo. De hecho, en los estados que han legalizado el cannabis, el uso adolescente ha disminuido, según encuestas. La mayoría de los consumidores en estados con cannabis legal compran en minoristas regulados, reduciendo aún más el papel del mercado ilícito.
Los beneficios económicos de la legalización
Los estados que han legalizado el cannabis de uso adulto han visto importantes beneficios económicos. Desde 2014, las ventas de cannabis han generado más de 15 mil millones de dólares en ingresos fiscales. Estos fondos se han utilizado para apoyar servicios públicos como la construcción de escuelas y viviendas asequibles, proporcionando un beneficio tangible a las comunidades locales.
- La legalización ha reducido los arrestos relacionados con la marihuana.
- Los ingresos fiscales de las ventas de cannabis han financiado servicios esenciales.
- El consumo de cannabis entre adolescentes ha disminuido en los estados con ventas legales.
Perspectiva personal
Es sorprendente ver cómo la reforma de la marihuana, antes considerada un tema controvertido, se ha convertido en un asunto político principal. Tanto Trump como Harris han avanzado mucho en ajustar sus posiciones, probablemente impulsados por el abrumador apoyo público a la legalización.
Desde mi perspectiva, este cambio representa más que una simple conveniencia política: refleja un reconocimiento social más amplio de que la guerra contra la marihuana ha sido costosa e ineficaz.
Aunque aún queda trabajo por hacer, es alentador ver que ambos partidos políticos importantes comienzan a priorizar políticas sensatas sobre el cannabis que reflejan la voluntad del pueblo.